Nota XII

La felicidad es impredecible.

Cuando te alcance

-déjate de melindres-

Bendícela y comparte.

Nota XI

Lo más penoso de las enfermedades

no es el dolor físico,

es la dependencia.

Nota X

Nota IX

No hay nada mejor que el chocolate

para adelgazar las pesadumbres.

Nota VIII

Que la sonrisa sea perpetua

en tus labios,

en tu talante,

en tus ojos…

Y el último rictus

que abandone tu boca.

Nota VII

En ocasiones tengo arrebatos

de plenitud o  alegría

que, por miedo a no saber

cuán caros me saldrán,

inmediatamente amanso.

Nota V

La controversia

es como la carihuela;

cuanto más se riega

más se ensancha.

Nota VI

¡Descubre...!

Descubre lo dulce que es la Vida

cuando no le amargas

la vida a los demás.

Nota IV

Nota III

Nota II

Nota I