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De aquella historia
-de amor, historia-
mitad luz, mitad nostalgia,
queda una insinuación,
escenas leves
cual encajes de inciertos perfiles.
Aún así, a veces, asciende y vuela
por el delta de la memoria,
anegando las estrías de un corazón
herido de años
y oscuro de sangre y sombra.
Desde el suburbio donde
la exilió el calendario,
a medio morir, aletea
germinando ráfagas de bruma,
pavesas anémicas que
borran huellas, miradas, aires....
y entre las sienes presurosas se asienta,
avivando un rumor de lágrimas;
más de hábito que de dolor.
Aquella historia,
mitad luz, mitad nostalgia,
a láminas suspira y expira
en la conciencia furtiva
del que, alguna vez,
se sintió amado y… amó.
®Trini Reina
Octubre 2010
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