Este
batallar sin estrategias
contra
la pereza recurrente.
Esta
alegría de estraperlo
bajo
febrícula indeleble.
Este
cáustico cansancio velando,
poro
a poro el continente.
Estas
victorias tan de mentira
que
lidera un tesón asido con alfileres,
que
cruje o se oxida o se quiebra
y
a deshoras se llama enclenque.
Esta
soledad galerna,
de
dimensiones imponentes;
maga
del mal,
certeza
y asombro permanente.
Esta
dispersión tras de los ojos,
fanales
de ojeras impertinentes.
Esta
orfandad sobre los huesos,
ausentes
de calcio y temple.
Este
vicio por la vida,
hilvanado
con hebras decadentes.
Esta
salud titiritera
con
ensalmos se mantiene.
Equilibrista
de la esperanza, volatinera,
que
con alquimias se engrandece;
mientras
la torva realidad es paloma,
Obra de Edward Hopper
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.