y se
hizo espuma el circulo
donde
languidecía.
En tus laderas crecieron
las
flores que azulean mis valles
y el
cuerpo se nombra tuyo.
Las
horas ya no se suicidan en los relojes
y
tañen en tus ojos clandestinos.
Se
desarmó el sortilegio
que
constreñía
el
árido calendario de mi vientre
y
descubrí
de la
pasión
su
geometría.
©Trini Reina/2010
Obra de Félix Vallotton
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.